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viernes, 18 de junio de 2010

ÁNGELES DESCUIDADOS

Pobres, pálidos ángeles de los cementerios,

que veláis incansables bajo el frío

los sueños terroríficos de los niños muertos,

que debistéis guardar cuando eran vivos.

Dulcisimos espíritus de mármol

de mirada cegada y alas rotas,

mutilados, mellada la sonrisa

por la lluvia y el viento, en los labios mordidos,

caídos como pétalos. Sólo memoria sois

de traicionados rezos infantiles,

cuando cándidamente os invocaban.

¡Ah, la pura materia de los niños!,

en la que atesoramos lo mejor de nosotros,

y donde Él nos asesta la más cruel herida:

la de verlos crecer bajo la hierba.

Inalcanzable imagen del tierno adolescente

que, abrasado de sueños y alentado

por hálito divino, osó volar muy alto,

ahora sólo escombro derribado.

A vuestros pies están, ya putrefactos

como la propia lepra que os destruye,

los que sus madres os encomendaron

al nacer. ¡Ay, ángeles descuidados!
 
 
(De "Terrenal y marina").

9 comentarios:

  1. Esos ángeles a todos nos han acompañado en un momento de nuestra vida, pero efectivamente son muy despistados con algunos o , más bien, con muchos. Yo creo que son muy selectos, tirando a pijitos, en fin.
    Un placer la lectura.

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  2. Es increíble como dentro del dolor se puede crear belleza. Si la visita a un cementerio es tétrica, no dejan de conmovernos las estatuas de mármol...Muy bello escrito.

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  3. Querida Elvira, es cierto, si todos los niños tienen un ángel, sobra decir que, por echarle la culpa a alguien, algunos debieron tener un despiste.
    Hermosísimo poema. Es un placer leerte, algo debe haber en la sangre de los Daudet.
    Un fuerte abrazo.

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  4. Leyendo su magnífico poema, me he recordado de una cosa que me sucedió de niño. Acompañado por mi abuela fui al cementerio a llevar flores a una amiga de escuela que días antes había fallecido en un accidente; en su tumba había una estatua de mármol con un ángel. Pregunté a mi abuela porqué ese ángel estaba allí, y me respondió :”Ese era el ángel protector de tu amiga, y está pagando su descuido”.
    Su delicado poema me ha evocado este recuerdo y quise decirle porque me ha puesto lágrimas en los ojos . Es una placer haberla leído.
    Leo

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  5. Vestido de caja blanca
    asomas tu cara a la muerte
    para dejarnos tristes y vivos,
    soportando esta injusta derrota.

    Morir quisiera yo,
    irme contigo
    y volver con la sonrisa
    de haberte conocido.

    Amiga mía, perdona estos pequeños versos como comentario a tu maravilloso poema. Me han recordado a mi hermano Rafa.

    Un cariñoso beso.

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  6. Mi querida Elvira, este tremendo poema toca la fibra más sensible y estremece porque es difícil imaginar un alma inocente a la que se le arrebata la vida, ¡ay!, sin duda de las muertes es la más dura y la más complicada de asimilar. Pero como siempre una maravilla disfrutarte, la primera vez que lo leí lloré, ya te contaré...

    Ando por las alcarrias, vine a las bodas de oro de mis padres y se me ha roto el coche, la avería es gorda (la caja de cambios), cachis en tó y en más. Es por eso que he tardado en contestar y comentar.

    Te agradezco de nuevo tu invitación, pero después de lo del coche me parece que no sólo no voy a hacer vacaciones, es que voy a tener que comer macarrones todo el verano ;-)

    Besos, muchos y una abrazo enorme.

    Ps. Andre te envía su cariño.

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  7. No creas que es la primera vez que leo este poema tuyo dedicado diría yo, a los verdaderos ángeles. Ángeles que nos colman de felicidad y se van dejando tras de sí su estela, la única verdadera. Sin ángeles custodios que puedan custodiar nuestro dolor. Sólo espero que ellos, nuestros verdaderos ángeles puedan con su amor aliviar la desesperación que provoca su marcha.
    Te mando un abrazo.

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  8. Querida Elvira me emociono leer tu bello poema.
    Sabes? yo pienso que los ángeles siempre fueron los niños que por algun motivo dejaron esta tierra y como almitas puras pasaron a ser ángeles que de alguna forma nos ayudan en los momentos mas difíciles de nuestras vidas.
    Los niños no mueren pasan de ser humanos a ser ángeles en la tierra, quizás esa idea me hace bién por eso asi lo pienso.
    besitos querida Elvira es un placer visitarte y disfrutar de tu poesía

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  9. Es un poema muy bello.
    He llegado hasta aquí gracias al blog de BLETISA, donde escuché el otro poema que también me gustó mucho. Por eso me puse a indagar.
    Me alegro de encontrame también con Paloma en este lugar, con la que coincido cada vez en más ocasiones. Se ve que las vibraciones semejantes tienden a reunirse.

    Un placer haber encontrado tu poesía, Evira. A partir de ahora será un nuevo punto de peaje para mí.

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