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martes, 17 de abril de 2012

REGRESO

Vuelvo. He conseguido salir del agujero
que un día me engulló siendo muchacha.
La luz de la mañana me acaricia
como la tibia seda de unos brazos de madre.
Es cierto que entre tanto ha pasado la vida,
los amigos han muerto o no me reconocen.
¿Dónde están -se preguntan- sus ojos abismales
que asustaban de bellos y profundos,
la orgullosa mirada que exigía
el legado de los dioses? Ay, la felicidad.
¿Dónde se fue la flor de sus mejillas
y su cuerpo moldeado por el viento?

No me atrevo a decirles
que han pasado los años para todos
y tampoco son ellos lo que eran.
Sus fértiles cerebros,
donde ayer bailaban jubilosas las ideas,
son urnas de cenizas
donde la vida ardida pasa, melancólica,
su película de espectros.
La víbora salaz, antes guerrera,
inofensiva
se esconde arrugadita bajo un faldón de grasa.
El rojo corazón es hueso negro.

¿Podría confiarles que vuelvo de una guerra,
en las negras cloacas de mi alma,
con el saurio implacable que me habita
y se bebió goloso el dulce plasma
dejándome vacía como un traje?
Que quemé los candiles de los ojos
luchando con las sombras como un ciego.
Mi corazón alimentó alimañas,
mi cuerpo fue bocado de las ratas
de la traición, la rabia, el desamor.
¿Les entristecerían mis delirios
o me oirían lejanos,
desde la indiferencia de la muerte?

Como una pobre bestia que no puede quejarse,
doy otra vuelta a la triste noria
y pido una sonrisa de limosna
que me alimente el día de esperanza.

Regresar del infierno es un viaje muy largo,
y no sé, al encontraros, si valía la pena.

Elvira Daudet De Cuaderno del delirio, inédito)

29 comentarios:

  1. Elvira, amiga, admirada poeta: Ya observo que hablas de esperanza. Realmente la esperanza está allí, siempre inmóvil, esperando que la tomemos, que la bebamos y yo brindo con ella por tu renacimiento a la claridad de la verdad
    y de la vida. Sabes que tendrás ese segundo de acercamiento a ella y que yo lo sabré. Un carñoso abrazo.

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  2. Sí vale la pena, regresar y vivir un instante.
    Un poema, como todos los tuyos, demoledor, potente, profundo, precioso, y que contiene una esperanza entre sus versos.
    Te envío mi sonrisa siempre.
    Un abrazo
    María

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  3. Nunca desaparecí, bueno de hecho sí pero incosciente y porque soy un desastre.
    No en la voluntad de mantener nuestras almas cerca.
    No concibo al ser humano en términos de utilidad. Tú eres necesaria.
    Tengo ganas de verte y de no perder más tiempo.
    El 26 seguro!
    Besosabrazos
    N

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  4. Leerte, reencontrarse en tus sentires, reconocerse en lo vivido... Es un placer leerte, conocerte.
    Te dejo un abrazo admirado.

    Me gustaría que me escribieras, si puedes, porque no encuentro tu mail.

    bsalas04@hotmail.com

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  5. salir y regresar
    pero partir siempre, una constante en la vida
    dejar y alcanzar
    infiernos y paraísos a un solo giro de nuestro andar...

    Intenso decir Elvira, y es que somos un Re hasta el último giro


    abrazo grande y buena semana

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  6. Mira que yo soy de leer poemas cortos (tendré que empezar a dejar de decirlo) porque mi atención es difícil captarla y tus poemas siempre me envuelven, me engullen y hacen de mí lo que tus versos quieren.

    Qué bien describes ese llegar del infierno que todos de alguna forma conocemos, reconocer que el tiempo arrugó lo que antes era lienzo blanco y qué real.

    Creo que lo que más me gusta de tu poesía es que pones voz a lo que muchos no sabemos decir. Ese infierno que tanto se empeña en rondarnos.

    Los dos últimos versos son tremendos, con esa ironía que más que sonrisa devasta, terrible conclusión del que ha vencido el más cruel de los infiernos, ese que nadie ve, ese que late por dentro.

    Qué poemón!!!

    (en unos días tendré en mis manos "el don desapacible" me ha costado encontrarlo pero al final me lo envían de una librería pequeñita de Valencia)

    Besicos un quintal y dos

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  7. me llevaste al crujir del cuello cuando da la vuelta y mira atrás.
    sentí hundido el relámpago, en la entrevista que te hizo paloma corrales, al recitarlo.
    ahora se viene la tormenta
    que cala
    implacable.
    un abrazo, sincero.

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  8. Me encanta como escribes.

    Felicitaciones!!!

    Un abrazo Elvira.

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  9. Querida y admirada poeta
    qué decirte, después de leerte
    la emoción me deja sin aliento,
    tiene tal fuerza este poema
    que ese regreso es un grito
    a la vida, a la esperanza
    y creeme siempre vale la pena
    porque tú tienes mucho que ofrecer
    todavía.

    Un abrazo,muy muy fuerte.

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  10. Elvira, admirada poeta, tu poema me llega hasta el hueso. Qué decir, ante palabras tan bien reunidas, la sabiduría de quien regresa. La poesía también puede tener una función terapéutica.
    Un gran abrazo.

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  11. Brutal. Tal vez la peor de las guerras sea la que uno mantiene consigo mismo.

    Sabes, llevo tiempo pensando cuál es la clave de tu poesía, y hoy creo poder afirmar que no te limitas a reproducir una experiencia ya vivida, no, la creas y la dotas de respiración y de latido, por eso precisamente palpitamos todos con tus poemas. Parafraseando a Jaime, digo con absoluta devoción: "es palabra de Elvira, amén".

    Dos besos, uno por bella y otro por poeta.

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  12. Ah, por cierto "mendigar una sonrisa como una pobre bestia para dar otra vuelta a la triste noria", no me parece a mí que sea ningún canto de vida ni de esperanza. Más bien todo lo contrario, lo único que prevalece en este poema es el más duro y aterrador escepticismo.

    Otro beso.

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  13. Gusto de los poemas cortos; pero a tu lado es un placer devorar cada verso y cada estrofa. Existe en ti tanta sabiduría, tanto pensamiento elevado y sublime, que mis ojos no se apartan ni un segundo de tus palabras.
    Eres grandiosa Elvira.
    Un beso y mis abrazos desde mi hemisferio otoñal.

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  14. Comienzo por el final. Es demoledor, o lo he leído en un momento que me ha pillado con la guardia baja. Dudar sobre si ha merecido la pena el viaje de regreso desde el infierno, porque cuando se ha llegado, se ha encontrado el paso del tiempo, una terrible tarea de destrucción es como para dejarle a uno sumido en las dudas acerca de la propia vida.
    Sí, estoy de acuerdo con Paloma: el más duro y aterrador de los escepticismos.
    Sin poderlo remediar, me ha llegado al recuerdo el soneto de Quevedo, que empieza diciendo: "Miré los muros de la patria mía", y concluye con ese terceto tan estremecedor:

    Vencida de la edad sentí mi espada,
    y no hallé cosa en que poner los ojos
    que no fuese recuerdo de la muerte.


    El poema, en mi opinión, es un lujo, es una piedra preciosa. No sé si el tono del poemario en que se incluye, ese inédito "Cuaderno del delirio" que citas, está escrito con esa melodía, pero aún así, la categoría puede ser excepcional.
    A veces uno tiene la impresión de que hay que aparentar felicidad, sonrisas, bienestar.
    Pero si uno en algún momento (con independencia de lo que dure ese momento: minutos, años, días, meses...) se siente así de mal al regreso del infierno, tiene que decirlo, quizá por ahí comience a desanudarse ese sentimiento de horror.
    En fin, que, de nuevo, admiro tu tarea, tu tesón y la sinceridad con la que te expones ante nuestras miradas.
    Sólo me resta decirte que sigo conmocionado por estos versos.

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  15. Vuelvo. (solo para decir)
    Qué tonta soy, qué tonta...
    Creo que la "inteligencia" no tiene tanto que ver con saber cuándo irse sino con notar cuando uno ha de quedarse.
    Qué estúpida si me alejo y qué poco hablan de mí mis actos.
    Vuelvo porque no concibo otra posibilidad y porque te admiro mucho.

    (y quizá también un poco porque tengo la noche pelín tonta. pues eso!)

    Besosabrazos
    N

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  16. Elvira, es siempre un inmenso placer volver aquí y leer tu hermosa, impecable y reflexiva poesía. Un fuerte abrazo desde Canarias.

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  17. La segunda estrofa es un estilete, y a partir de ahí es una hemorragia.
    Impresionante, Elvira. Escribes bien bonito. Todo el poema es un lujo. Y es un lujo tenerte en la red.
    Me quedo sin palabras y hago una reverencia.

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  18. Vale la pena, Elvira, sí vale la pena regresar del infierno conservando "un fértil cerebro donde las ideas no son urnas de cenizas sino hermosas palabras que, el implacable saurio, no ha sido capaz de vaciarlas".

    Celebro, por fortuna, ese regreso.

    Un inmenso abrazo de enhorabuena y bienvenida.

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  19. Por fin llego, querida Elvira. Lo he leído varias veces y no acierto a comrender tanto desgarro dicho con la suavidad de tus versos. Es impresionante el fondo y la forma. Gracias al sufrimiento plasmado, una puede permitirse leerlo en alto y disfrutar del ritmo y de cada palabra que parece colocada sin la menor pretensión.
    Sabes que te admiro y que te quiero; menos mal que estás aquí para darte un beso merecido.

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  20. ¡Ay, querida dama!... Y yo que voy y vengo cada día al infierno y desde él y ya el viaje me parece corto.

    Dices:

    "La víbora salaz, antes guerrera,
    inofensiva
    se esconde arrugadita bajo un faldón de grasa."

    Y yo me alegro de estar delgado.

    Y me alegro también de seguir por aqui, por si acaso quisieras uno de estos días hablarme, ami, que aún no soy ninguno de tus muertos.

    Un beso.

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  21. Eras eres y serás grande, vengas de donde vengas.

    Y sí merece la pena el regreso cuando se tiene tanto que decir y tan magistralmente.

    Desde que te conocí te admiro y te seguiré admirando.

    Un gran a brazo.

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  22. Me encantan tus poemas.Cabalgan entre la buena literatura y la comprensión explicita de la palabra que rezuma el fondo de tu alma.Me encanta este poema,felicidades por plasmar tan sumamente bien y sin censuras, esa "vuelta".Besos de todo corazón amiga.

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  23. Elvira, admirada poeta: En junio leeré algunos de mis poemas en Madrid, en la sala "Libertad 8"; sabiendo que por allí han pasado escritores y poetas como tú, me siento un poco intranquilo con el temor de no estar a la altura de dicho lugar y acontecimiento. También, estoy muy contento, claro...
    Si estuvieras por allí ese día, sería un honor para mí.
    Besos

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  24. He sobrevivido a mil muertes
    me ha desgarrado la pena y el abandono
    he superado por momentos mi infortunio
    No me mientas Cyrano,
    ¿es esto el paraíso...
    o sigue siendo el averno?

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  25. Hola Elvira,
    vengo a invitarte a visitar mi blog donde he grabado en mi voz un maravilloso poema tuyo y me gustaría que lo escucharas para saber si te gusta.
    Ha sido un placer inmenso realizarlo. La música es elección de Ruth.
    Te dejo un abrazo

    http://beatrizsalas10.blogspot.com.es/2012/04/elvira-daudet-mariposa-limonera.html

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  26. Hola Elvira, buenas noches, entro por primera vez en tu lindo blog y con tu permiso me quedo aqui por que es un lugarcito donde hay una escritura maravillosa, un saludo, feliz fin de semana.

    Lola Barea.

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  27. Esta monja se ha maravillado de sus letras. Yo soy tan solo una aficionada a la poesía, pero es mi pasión.
    La invito a conocer mi casa.
    Con ternura
    Sor.Cecilia

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  28. El final, ese final del poema que te deja con una duda y la mirada baja...
    Un besito, MAga.

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  29. Merece la pena regresar, cuando es el calor de los demás lo que te espera, tan distinto al infierno...
    Me duelen tus versos, la dulzura con la que cuentas cosas terribles.

    Un abrazo ENORME.
    Te quiero.

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